Un estudio realizado en 2006 por el prestigiado medio The Economist, titulado “Time to wake up: a survavey of Mexico” (tiempo para despertar: un estudio de México) señala claramente “que el principal problema de la economía mexicana es la carencia de una cultura de competencia, y que el gobierno tiene que ponerle fin al poder monopólico, público y privado, político, económico que se ha vivido durante décadas en el país”.
En la actualidad, el monopolio ejercido por el gobierno en el rubro de la electricidad, el petróleo, están causando una enorme daño al país, puesto que la infraestructura que se cuenta es prácticamente obsoleta, y al no contar con el capital necesario para realizar ajustes, reconfiguraciones en refinerías y centrales eléctricas, para exploraciones en zonas profundas o campos como chicontepec, el gobierno esta causando un daño severo a la economía, debido a que esto reduce su competitividad a nivel global y hace que las paraestatales mexicanas estén en números alarmantes.
No es una cuestión de patriotismo y regalar los recursos del país a extranjeros., Países con tendencias mas izquierdistas y nacionalistas como Brasil, Cuba, han confiando en la ayuda que puede proporcionar el capital extranjero paro la exploración y desarrollo de tecnologías necesarias para poder detonar la infraestructura necesaria y así obtener mas recursos, esto no significa para nada vender los recursos, sino una manera de financiar un gasto que muchos países como México no podrían absorber.
El monopolio privado en México es muy bien conocido, desde las telecomunicaciones lideradas por American Móvil y Telmex, el maíz con el grupo Maseca, el cemento con Cemex, televisión con Televisa y Tv Azteca, los bancos con los conglomerados internacionales, hoy en día en nuestro país es prácticamente imposible crear un nuevo banco sin depender de uno grande, crear una nueva televisora o empresa telecomunicación, y en muchos de estos casos, gozan de beneficios auspiciados por el propio gobierno.
Estos grupos lideres en sus ramos, ejercen gran influencia en el mercado nacional, el cual les permite fijar los precios a su antojo, en comparación con países desarrollados y otras economías emergentes, los precios de los principales monopolios mexicanos son muchísimo mas alto que los mismos servicios en otras partes del mundo.
No solo en la economía se pueden dar los monopolios, en el ámbito social, los monopolios ejercidos por los sindicatos, llamado de otra manera, corporativismo mexicano, los cuales datan desde los años 30 con la integración de las masas por el Gral. Lázaro Cárdenas.
Este mecanismo ha permanecido intacto desde aquellas fechas, ya que muchos sindicatos son realmente mafias, que no cumplen con su objetivo real, el ver por los trabajadores, los cuales obligados dan la cuota sindical, en muchos países la cuota es libre de elección de los trabajadores, y tienen la opción de escoger su sindicato, en México esto no es posible, desmontar un aparato sindical monopólico no se traduce al abolir la libertad del movimiento sindical, sino implica democratizar, modernizar y sujetar a las leyes de transparencia a los sindicatos.
Los sindicatos mexicanos, juegan un papel importante e influyente dentro de la política mexicana, por eso los lideres de dichos sindicatos no son tocados por los gobiernos o acusaciones, aun cuando son sabidos sus actos de corrupción, como los perpetrados por Napoleón Gómez Urrutia contra sus agremiados del sindicato minero por un desfalco de mas de 50 millones de dólares.
Sin duda, México tiene que modernizar sus instituciones paraestatales, abriendo la inversión a quien desee realizarla, reglamentar y poner en orden a los monopolios que atentan contra la economía de los mexicanos, tiene que reglamentar y transparentar las actividades de los sindicatos. Esto es algo que el presidente Calderón se ha planteando, en parte con una nueva serie de reglamentaciones con la Cofetel y la SCT y con su propuesta de una reforma laboral.
Un estudio realizado en 2006 por el prestigiado medio The Economist, titulado “Time to wake up: a survavey of Mexico” (tiempo para despertar: un estudio de México) señala claramente “que el principal problema de la economía mexicana es la carencia de una cultura de competencia, y que el gobierno tiene que ponerle fin al poder monopólico, público y privado, político, económico que se ha vivido durante décadas en el país”.
En la actualidad, el monopolio ejercido por el gobierno en el rubro de la electricidad, el petróleo, están causando una enorme daño al país, puesto que la infraestructura que se cuenta es prácticamente obsoleta, y al no contar con el capital necesario para realizar ajustes, reconfiguraciones en refinerías y centrales eléctricas, para exploraciones en zonas profundas o campos como chicontepec, el gobierno esta causando un daño severo a la economía, debido a que esto reduce su competitividad a nivel global y hace que las paraestatales mexicanas estén en números alarmantes.
No es una cuestión de patriotismo y regalar los recursos del país a extranjeros., Países con tendencias mas izquierdistas y nacionalistas como Brasil, Cuba, han confiando en la ayuda que puede proporcionar el capital extranjero paro la exploración y desarrollo de tecnologías necesarias para poder detonar la infraestructura necesaria y así obtener mas recursos, esto no significa para nada vender los recursos, sino una manera de financiar un gasto que muchos países como México no podrían absorber.
El monopolio privado en México es muy bien conocido, desde las telecomunicaciones lideradas por American Móvil y Telmex, el maíz con el grupo Maseca, el cemento con Cemex, televisión con Televisa y Tv Azteca, los bancos con los conglomerados internacionales, hoy en día en nuestro país es prácticamente imposible crear un nuevo banco sin depender de uno grande, crear una nueva televisora o empresa telecomunicación, y en muchos de estos casos, gozan de beneficios auspiciados por el propio gobierno.
Estos grupos lideres en sus ramos, ejercen gran influencia en el mercado nacional, el cual les permite fijar los precios a su antojo, en comparación con países desarrollados y otras economías emergentes, los precios de los principales monopolios mexicanos son muchísimo mas alto que los mismos servicios en otras partes del mundo.
No solo en la economía se pueden dar los monopolios, en el ámbito social, los monopolios ejercidos por los sindicatos, llamado de otra manera, corporativismo mexicano, los cuales datan desde los años 30 con la integración de las masas por el Gral. Lázaro Cárdenas.
Este mecanismo ha permanecido intacto desde aquellas fechas, ya que muchos sindicatos son realmente mafias, que no cumplen con su objetivo real, el ver por los trabajadores, los cuales obligados dan la cuota sindical, en muchos países la cuota es libre de elección de los trabajadores, y tienen la opción de escoger su sindicato, en México esto no es posible, desmontar un aparato sindical monopólico no se traduce al abolir la libertad del movimiento sindical, sino implica democratizar, modernizar y sujetar a las leyes de transparencia a los sindicatos.
Los sindicatos mexicanos, juegan un papel importante e influyente dentro de la política mexicana, por eso los lideres de dichos sindicatos no son tocados por los gobiernos o acusaciones, aun cuando son sabidos sus actos de corrupción, como los perpetrados por Napoleón Gómez Urrutia contra sus agremiados del sindicato minero por un desfalco de mas de 50 millones de dólares.
Sin duda, México tiene que modernizar sus instituciones paraestatales, abriendo la inversión a quien desee realizarla, reglamentar y poner en orden a los monopolios que atentan contra la economía de los mexicanos, tiene que reglamentar y transparentar las actividades de los sindicatos. Esto es algo que el presidente Calderón se ha planteando, en parte con una nueva serie de reglamentaciones con la Cofetel y la SCT y con su propuesta de una reforma laboral.
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